lunes, 15 de febrero de 2010

¿Qué sucedió con Johnny Mora?

UNICORNIO

Dejadme soñar
y habitar eternamente mi casa
del unicornio y los fantasmas.
Dejadme deambular entre espejos
y habitaciones
hasta caer vencido por recuerdos
y otras geometrías del pasado;
entrar en la gruta
de los encantos
y arrodillar mis ojos negros
en el pozo mágico
hasta que el olvido rompa
mi hilo dorado
de la cordura y la conciencia.

Dejadme recorrer por siempre
la geografía plácida del ser interior.

Dadme sueños y no azules cadáveres.
Dadme sueños en vez de semanas.
Dadme sueños y no mujeres sin senos.
Dadme sueños y no este once de julio.

No veis que estoy amando la vida,
que detengo mi reloj de arena
entre lo rutinario y lo maldito
y amo.

No véis que el amor vino una vez
en su carruaje de serpientes
y se convirtió en un toro
--era el toro seductor y cruel.
Ahora yazco en esta ruleta
inagotable de las horas
entre el amanecer y la muerte.

Por ello, dejadme soñar.
Inventar un sitio claro
para llegar de pronto
cuando no exista el silencio,
cuando no exista en el mundo
un niño sin juguetes cósmicos
y sin estrellas terrestres.
Dadme un sueño,
una ilusión
y otras esperanzas y os mostraré
una mañana en que todos los hombres
se amaron.

Dejadme soñar,
que los sueños son mi eterno viaje
entre espejos y habitaciones.
de El libro del Minotauro (Premio Joven Creación 1990)

domingo, 14 de febrero de 2010

¿Qué sucedió con Ricardo Segura Amador?

CICLO DE NACIMIENTO Y MUERTE

Nunca los altos velámenes tardíos sobre el horizonte muerto,
nunca los orígenes, el nacimiento flotante en la nada aúrea,
nunca los santos, los demonios, los mediocres,
nunca, por cierto, los augurios, el hado, el destino,
--¿pero el libre albedrío?--, nunca, nunca en las horas,
los minutos reverberantes en el tiempo común.

Nunca las humillaciones --palabras--, vejaciones, --palabras--,
nunca el Amor: de mujer, del mundo, del cielo o del infierno,
nunca el pecado mortal, nunca la virtud cariacontecida,
nunca la hipocresía,
jamás los duendes errabundos del aire, en bosques perdidos,
nunca las ilusiones.

Jamás nunca el espíritu deshecho por el espacio tiempo,
ni el frío o el calor, la Vida, nunca las contradicciones,
las divinas paradojas, los contrarios,
jamás las aves como cuervos negrísimos o como ángeles
ni las flores más exquisitas efímeras,
nada, jamás, nunca --palabras--
sobrevive,
¿sólo la Muerte?

II

Porque soy solo memoria, me hago sordo a la muerte
tal vez porque no recuerdo lo que fui antes de mí,
en la arena circular del abismo, donde las espumas de la blanca sabiduría
apenas logran no desaparecer,
absorbidas como aves pasajeras.

Porque nací siendo ¿nada, retoño de ceniza ardiente aún
yaciendo como un mínimo infierno cada vez más cielo,
cada vez más incierto, a un ritmo de sangre
que hace estruendo de esperanzas?,
me hago poco a poco más forma primera,
sustancia concretándose, haciéndose espiral del no olvido
para al fin disolverse de nuevo en ¿espacio vacío
ya sin alma, el cuerpo y la vivencia, arteria destruida
por el mismo sueño o Universo que la provoca y requiere,
...en puntos metafísicos o en velos infinitos de conciencia trasparente,
en nada, en fuego para el Fuego y agua sobre el agua,
en frío, tal vez, para la angustia
y la preterición eterna del Mar y del Silencio?
Porque soy un sólo grito cada vez más enorme,
una lluvia de vida cada vez más diluvio universal,
terminaré siempre más misterioso en la muerte que en la vida,
más polvo sin sentido
¿qué regresa de nuevo al suelo apasionado?

Porque lenguas insensibles nos lamen, nos modelan
como a un sabor amargo que inevitablemente hay que tragar.
de Ecos (Premio Joven Creación 1989)

viernes, 12 de febrero de 2010

Una Noche

La habitación era pobre y vulgar,
escondida en los altos de la taberna equívoca.
Desde la ventana se veía la calleja,
estrecha y sucia. Desde abajo
subían las voces de unos cuantos obreros
que distraían su tiempo jugando a las cartas.

Y allí sobre un lecho barato, miserable,
el cuerpo tuve del amor, los labios
voluptuosos y rosados de la embriaguez--
tal embriaguez, que aún ahora
cuando escribo ¡después de tantos años!
en mi casa vacía me embriago de nuevo.
Kavafis

martes, 2 de febrero de 2010

¿Tenemos los promotores culturales que nos merecemos?

"Vivía en Londres en un apartamento oscuro en Kensington, con un cuarto grande donde cocinaba y otro pequeño y triangular, donde recibía a sus amigos y escribía. Tradujo poesía japonesa. Fundó el imaginismo (Cada palabra debe ser una imagen que se vea) con Richard Aldington y H.D.. Más tarde fundó el Vorticismo con Percy Wyndham Lewis y el escultor Gaudier Brzeska. Su influencia se dejó sentir en Yeats, única voz viva entonces en la lengua inglesa, a pesar de la diferencia de edades. Dio a conocer a Rabindranath Tagore. A el se debió la publicación del Retrato del Artista Adolescente y después de la de Ulises y del primer poema importante de Eliot. A los artistas jóvenes, especialmente a los americanos, les buscaba editores, subsidios, empleos para que pudieran escribir, los invitaba constantemente a comer y aun les daba su propia ropa, cuenta Eliot. En París a un músico norteamericano aún no muy conocido, Antheil, le consiguió un concierto y después escribió un libro sobre él para atraerle público. Para dar a conocer a Brzeska escribió otro libro. "Los defiende cuando los atacan, los mete en las revistas y los saca de la cárcel. Les presta dinero. Les vende sus cuadros. Les arregla conciertos. Escribe artículos sobre ellos. Los presenta a mujeres ricas. Les busca editores a sus libros. Pasa toda la noche con ellos cuando dicen que se están muriendo y asiste a sus testamentos. Les paga por adelantado el hospital y los disuade del suicidio. Y al fin muy pocos se han abstenido de enterrarle el cuchillo en la primera ocasión."
Ezra Pound, Ernesto Cardenal

REFLEXIONES ACERCA DE LA ANACRONÍA POÉTICA EN LA POSTVANGUARDIA Y TRANSVANGUARDIA

  El anacronismo es uno de los problemas que más interés ha suscitado en mi mente, quizás, porque la literatura acontece en el tiempo sin to...